En octubre, el último tren que unía la estación de Pehuajó con Once, en Buenos Aires, realizó su recorrido final, afectando también a las localidades de 9 de Julio y Carlos Casares. Este recorte ha suscitado protestas entre los vecinos y reclamos de dirigentes políticos, ya que el servicio ahora solo llega hasta Bragado.

Ante esta situación, la Asociación "Salvemos al Tren" lanzó una campaña para restaurar el servicio hasta Pehuajó. Sus miembros advierten que la decisión perjudica a miles de familias de la región.

Jorge "Pato" Gómez, activista de la asociación, mencionó que, aunque aún no han contactado directamente a Trenes Argentinos ni a la gerencia del Ferrocarril Sarmiento, continúan reuniendo firmas con el respaldo de la comunidad. "Es inaceptable que por un recorte de 100 millones de pesos el tren no llegue a Pehuajó, afectando a tantas familias", afirmó.

El próximo viernes, voluntarios recogerán firmas y grabarán testimonios de pasajeros a bordo del tren para fortalecer la causa. Luego, entregarán las firmas y videos a Trenes Argentinos y la gerencia del Sarmiento, buscando visibilizar el impacto de esta medida.

Gómez destacó la relevancia del servicio ferroviario no solo como opción económica, sino también por sus beneficios sociales y ambientales. "El tren disminuye el tráfico en las rutas y la contaminación. Un tren completo puede reemplazar a 20 micros en capacidad de pasajeros, reduciendo también el riesgo de accidentes viales", explicó.

Actualmente, las vías que conectan Bragado con el oeste están concesionadas a Ferro Expreso Pampeano, aunque Trenes Argentinos y esta empresa han operado sin conflictos hasta el momento.

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